Las fibras musculares y su relación con el fútbol.
Luis Rodríguez | @LuisARF8
El músculo esquelético, uno de los principales culpables de la ejecución del juego, se encuentra compuesto por fibras muy largas, grandes y cilíndricas. Su función principal es llevar a cabo, de manera voluntaria una contracción fuerte, rápida e intermitente sobre un tono muscular basal.
Estas fibras pueden clasificarse de la siguiente forma:
- Fibras de Tipo I (Oxidativas lentas): De tamaño pequeño, contienen muchas mitocondrias y una gran cantidad de mioglobina. Forman unidades motoras de contracción lenta resistentes a la fatiga. Generan menos tensión muscular que otras fibras. Los músculos de atletas de gran resistencia como los corredores de maratones tienen gran porcentaje de este tipo de fibras.
- Fibras de Tipo II A (Glucolíticas - oxidativas rápidas): De tamaño mediano, con muchas mitocondrias y contenido elevado de mioglobina. Gran cantidad de glucógeno y capacidad de realizar glucólisis anaeróbica. Constituyen unidades motoras de contracción rápida resistentes a la fatiga, generan un gran pico de tensión muscular. Algunos ejemplos de atletas con este tipo de fibras son los corredores de 400 o de 800 metros, nadadores de distancias medias y jugadores de Hockey.
- Fibras de Tipo II B (Glucolíticas rápidas): Contienen menos mioglobina y menos mitocondrias. Actividad anaeróbica importante, almacenan gran cantidad de glucógeno. Estas fibras integran las unidades motoras de contracción rápida propensas a la fatiga, generan un gran pico de tensión muscular. Algunos ejemplos de atletas con este tipo de fibras son los corredores de distancias cortas o los levantadores de pesas.

Seguramente, más de uno hemos escuchado a un entrenador hablar de las fibras musculares, esto puede considerarse desde un punto de vista conservador como algo aislado, sin embargo, el fútbol actual, su alta competitividad y la diversidad de características físicas del jugador, obligan a considerar factores Anatómicos, Fisiológicos e Histológicos.
Se han preguntado ¿Por qué hay jugadores que visiblemente tienen mayor resistencia física que otros? o ¿Por qué hay jugadores que pueden ser más propensos a las lesiones musculares?
Parte de la respuesta a la primer pregunta está aquí, el jugador con fibras musculares de tipo I, es resistente a la fatiga y posee una gran cantidad de mitocondrias, que le brindan a las células la oportunidad de extraer la suficiente energía de sus nutrientes. La energía liberada se usa para sintetizar una sustancia de alta energía llamada ATP, esta sustancia se difunde en la célula y libera su energía para otras funciones celulares y sobretodo para realizar la contracción muscular.
Si definimos a la fatiga muscular como la incapacidad de los procesos contráctiles y metabólicos de las fibras musculares para continuar generando el mismo trabajo, nos damos cuenta de que hay una relación directa con la energía y en consecuencia, con la cantidad de mitocondrias celulares.
En cuanto a la segunda pregunta, se ha comprobado que el grado de tensión muscular tiene relación con el desarrollo de contracturas musculares, dureza muscular y dolor músculo esquelético. Si recordamos, en la parte de arriba describimos que, por ejemplo, un atleta con fibras musculares de tipo I genera menos tensión muscular que los que tienen fibras musculares de tipo II A y II B.
El preparador físico, con colaboración del cuerpo médico deberá identificar las características físicas de los jugadores con los que cuenta el equipo. Es necesario que el entrenador entienda esto y lo convierta en un punto a favor.
Las fibras musculares de contracción rápida pueden desarrollar cantidades extremas de potencia durante unos pocos segundos hasta un minuto aproximadamente, debido a que las enzimas que favorecen la liberación rápida de energía desde los sistemas energéticos (fosfágenos y glucógeno - ácido láctico) son de dos a tres veces más activas que las de las fibras musculares de contracción lenta.
Las fibras musculares de contracción rápida pueden desarrollar cantidades extremas de potencia durante unos pocos segundos hasta un minuto aproximadamente, debido a que las enzimas que favorecen la liberación rápida de energía desde los sistemas energéticos (fosfágenos y glucógeno - ácido láctico) son de dos a tres veces más activas que las de las fibras musculares de contracción lenta.
La información es poder y por ello, identificar a los jugadores con mayor rapidez, fuerza y potencia en la contracción muscular (tipo II A y tipo II B) le permite saber al entrenador a quienes puede asignarle responsabilidades defensivas o quien tendrá mayor probabilidad de ganar por ejemplo, un uno contra uno en tareas ofensivas.
De igual manera, podrá identificar que jugadores tendrán mayor resistencia física y pueden ser aptos para realizar labores que involucren mucho esfuerzo (tipo I), un ejemplo podría ser un mediocampista con características físicas y técnicas que le permitan encargarse de la recuperación del balón.
El fútbol requiere que los responsables tengan una preparación integral y debemos estar abiertos a considerar cambios en la búsqueda de mejorías en la preparación o ejecución del juego.
Concluyo con esta frase: "Si hay un país en el mundo del fútbol que se pueda comparar con Francia es Colombia, tenemos defensores de Fibra II B, rápidos, fuertes, potentes, que pueden defender a espacio abierto". - Juan Carlos Osorio.
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